lunes, 8 de agosto de 2011

Mi dúo incondicional (Lush)

Hoy quiero hablar de dos potis que desde que los descubrí me tienen enamorada, porque le están funcionando muy bien a mi piel.

Antes que nada, tengo que presentaros a mi piel: desde, muy pequeña (empecé a los 9 años aprox.) tengo problemas de todo tipo de imperfecciones, y a parte de los constantes granos, puntos negros y brillos inmortales, mi piel se ha vuelto sensible, o reactiva, como lo queráis llamar. El caso es que cualquier cosa le afecta y una termina por estar hasta los eggs de mirarse al espejo todos los días y ver siempre algo nuevo (últimamente se han puesto de moda las manchas rojas).

Total, que a principios de este año, en una tarde de compras rebajiles con mi hermana me pasé por Lush (es que todo olía taaaan bien). Le expliqué a la chica mi problema y me recomendó el jabón de regaliz diciéndome que antes ella también tenía la piel con muchas imperfecciones pero que mira cómo la tengo ahora (prístina cual prepúber). Y yo pensando "sí bueno, puro márketing todo, no me lo creo, que otras perras se han puesto el mismo collar", pero al final me lo llevé, por probar que no quede, y la chica se curró una muestra del exfoliante Dark Angels.



Jabón de regaliz
En qué buen momento me lo presentó la chica, porque jamás me ha funcionado tan bien un jabón. Para mí, el jabón de antes del tónico era puro trámite, algo para limpiarme la grasa antes del tónico y nada más, porque ninguno de los cientos que he probado me daba resultados visibles. Hasta ahora claro, que estoy contentísima. Llevo siete meses utilizándolo y ya voy por mi segundo trocito (eufemismo, porque son enormes los trozos que te dan) y sinceramente, la piel me ha mejorado mucho, ya no tengo apenas granitos, me salen de cuando en cuando (aunque últimamente me salieron más por utilizar la crema matificante myskyn de Essence) y noto la piel más sana.

Dark Angels
Para mí es el exfoliante perfecto. Puede que a algunas os parezca demasiado agresivo, pero yo no he utilizado nada nunca que me deje la piel tan visiblemente limpia. Sólo lo uso una vez a la semana porque creo que más sería demasiado, previa limpieza con el jabón de regaliz. Después utilizo el tónico de árbol del té, también de Lush, para calmar un poco la piel y que no me quede tan tomate, y de verdad, que es una maravilla.

Con estos dos productos he notado mejoría en mi piel, cosa que me ha animado mucho a probar otras cosas de Lush y a ir por ahí regalando muestras a todo el mundo, en plan evangélico total, así que sólo me faltaba colgarlo en la Red ;)

1 comentarios:

subflava dijo...

Tengo ganas de que llegue ya el frío y vuelvan a traer Tronco de Navidad. Lush es un vicio, empiezas y no sabes cuándo vas a parar

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